
Las temperaturas han vuelto a bajar y en muchos hogares se ha vuelto a recurrir a la calefacción para combatir el frío. Aunque mantenerse abrigado es esencial, es importante considerar cómo la calefacción puede afectar a la salud visual. Por ello, dejamos una serie de consejos para que entrar en calor no perjudique a nuestra visión.
Lágrimas artificiales y ojos hidratados
La calefacción tiende a reducir la humedad en el aire, lo que provoca sequedad ocular, que puede causar irritación, picazón y enrojecimiento. Para combatir este problema, es recomendable utilizar lágrimas artificiales para mantener los ojos bien lubricados. Además, es importante beber suficiente agua para mantener la hidratación corporal.
Protección contra la luz artificial
En invierno la luz artificial nos acompaña durante más horas al día. La exposición prolongada a luces brillantes puede causar fatiga ocular y dolores de cabeza. Ajusta la iluminación de tu entorno para reducir el deslumbramiento, y considera utilizar lámparas con luz suave y difusa para minimizar el impacto en los ojos.
Parpadear de manera regular
El parpadeo es esencial para mantener la humedad en la superficie ocular. Sin embargo, cuando estamos concentrados en actividades como mirar la televisión o trabajar en la computadora, tendemos a parpadear menos. Haz un esfuerzo consciente para parpadear regularmente y descansar tus ojos, especialmente al estar cerca de fuentes de calor.
Uso de humidificadores
Instalar un humidificador en tu hogar puede ser beneficioso para contrarrestar la sequedad causada por la calefacción. Mantener un nivel adecuado de humedad en el ambiente ayudará a prevenir la evaporación rápida de la película lagrimal, reduciendo así la irritación ocular.