Con la temporada estival en pleno apogeo, es común que pasemos más tiempo en la playa o la piscina, donde debemos prestar especial atención a la salud de nuestros ojos para evitar posibles daños e infecciones.
Mientras lees esto, es probable que te esté llegando la frescura del aire acondicionado o del ventilador. El verano ha llegado con fuerza, y cualquier manera de refrescarnos es bienvenida. Si planeas disfrutar del sol y el agua, es importante recordar la importancia de cuidar tus ojos. Pero antes de invitarnos a un día de playa, asegúrate de haber visitado a tu óptico-optometrista para una revisión ocular y de llevar contigo unas gafas de protección solar homologadas, preferiblemente polarizadas, para protegerte de los rayos UV.
Por otro lado, el agua de las piscinas y playas puede provocar diversos problemas oculares, como enrojecimiento, irritación, sequedad, fotoqueratitis, erosiones corneales e incluso conjuntivitis. Evita frotarte los ojos si están en contacto con arena, ya que podrías sufrir lesiones en los párpados y los ojos. En su lugar, lávalos adecuadamente para eliminar cualquier partícula irritante.
Al nadar, es esencial utilizar gafas de natación homologadas, preferiblemente graduadas si lo necesitas. Esto te protegerá de bacterias, cloro y sal. Recuerda adquirir tus gafas únicamente en establecimientos sanitarios de óptica para garantizar su calidad y protección. Si experimentas cualquier molestia ocular, no dudes en consultar a un profesional de la salud visual.
Además, aquí tienes algunos consejos adicionales para cuidar tus ojos mientras disfrutas del sol y la arena.
- Evita aplicar protector solar cerca de los ojos para prevenir irritaciones.
- Limita la exposición directa al sol.
- Nunca mires directamente al sol para prevenir daños irreversibles en la retina.
- Usa un sombrero o gorra para proteger tus ojos.
- Mantente alerta a los reflejos en arena y en el agua.
- No confíes solo en la sombrilla para protegerte, ya que no bloquea completamente los rayos UV.
- Recuerda proteger tus ojos incluso en días nublados.
- Si usas lentes de contacto, asegúrate de llevar contigo los productos de mantenimiento adecuados. Además, complementa su protección con gafas de sol.
Con estos consejos, puedes disfrutar del verano al máximo mientras cuidas la salud de tus ojos. ¡Que tengas un verano seguro y lleno de diversión!
